Primer contacto
Conociéndonos todos
El primer encuentro con el cliente es super importante, es el inicio del comienzo. Cada persona tiene sus gustos, espectativas y presupuesto, del mismo modo que cada lugar tiene sus particularidades, sus potenciales a explotar y sus debilidades a considerar. En este primer contacto, afloran datos importantes para el diseño del futuro jardín: localización, tamaño, disponibilidad de agua, espacios que contendrá, estilo y colores de los elementos existentes o por construir, así como características relevantes del lugar: relieve y calidad del terreno, exposiciones de los distintos espacios respecto al sol, preferencias de los clientes por determinadas plantas, si piensan contratar a un jardinero para el mantenimiento, si tienen mascotas, etc.
Recopilación de datos
Conociendo más el lugar
Después de la primera visita vienen otras para ampliar la información que se tiene del lugar. Es fundamental un estudio de la vegetación ornamental y autóctona de las proximidades, que nos dá una idea del microclima del lugar y del terreno. Dependiendo de estas primeras observaciones se podrían realizar algunas calicatas para asegurarnos del tipo de terreno, profundidad y drenaje. Estas visitas in situ aportan una gran información y despiertan ideas para abordar el siguiente paso: Estudios previos.
Estudio previo
Explorando enfoques
Consiste en un estudio de aproximación al proyecto definitivo, en el que se le muestra al cliente ideas, enfoques conceptuales, dibujos, croquis, fotografías de las plantas y otros elementos que formarán parte del futuro proyecto paisajístico o jardines y una valoración aproximada del coste económico de la realización del proyecto. Una vez que el cliente ha aceptado el anteproyecto más idóneo, se pasa a la fase de elaboración del proyecto.
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Proyecto
Guía de actuación básica
Es un documento de ejecución donde se relaciona la obra de jardinería a acometer. Consta de un resumen o memoria del proyecto, plano del diseño mostrando la localización de las plantas y elementos no vegetales a utilizar, relación nominal y numérica de plantas para el proyecto y un presupuesto detallado de la realización/plantaciones de las unidades paisajísticas del proyecto por un contratista de obras de paisajismo habitual de este estudio de paisajismo.
Dirección de obra
Ejecutar todo como se proyectó
Consiste en la supervisión de la correcta ejecución del proyecto, teniendo los siguientes cometidos: asistir al replanteo del espacio a ajardinar con el contratista o director de obra nombrado por éste y una vez comenzada la obra, supervisar las calidades de las plantas, tierras, abonos y otros elementos presupuestados, durante la duración de la misma. También autorizar, previa consulta con el cliente, aquellos cambios de plantas, materiales o ubicación de plantas que, por causas coyunturales de disponibilidad en el mercado, técnicas o de otra índole, fuesen necesarios. Dar la conformidad al contratista, con la autorización del cliente, para la finalización y recepción de la obra, comenzando a partir de esa fecha el período de garantía en los términos recogidos en el presupuesto del contratista de la obra de jardinería
Supervisión del mantenimiento
Las plantas necesitan cuidados
Una vez terminada la ejecución de un proyecto, la labor de un buen mantenimiento es imprescindible para el buen desarrollo de lo plantado. Las plantas son seres vivos que van creciendo, evolucionando y, en el caso de árboles y arbustos grandes, cambiando sus formas y tamaños a lo largo del tiempo. Es por eso que, un buen cuidado de éstas, en lo referente a podas adecuadas, control de plagas y enfermedades, abonados, etc., hacen del mantenimiento una fase fundamental para que el proyecto llegue a expresar toda su potencialidad y belleza y permanezca fiel al diseño original.
